THE LONG JOHNS BAND

THE LONG JOHNS BAND.-“III”

Desde que se formó a mediados de 2013, la banda cántabra The Long Johns Band ha
mantenido una actividad constante, tanto en directo como en estudio, que ahora
cristaliza con la edición de éste su tercer álbum, “III”, grabado en en los estudios
“Guitar Town” de Muriedas (Cantabria) por el guitarrista y fundador de los Del Tonos,
Hendrik Röver.

La banda continua el camino iniciado en los discos anteriores, una base de blues y de
rock sobre la que añaden diversas capas e influencias, que en esta nueva entrega
suponen incursiones en el hard bop, la bossa nova, el country o el hard rock. Para ello
cabe resaltar la inclusión de un nuevo miembro, el guitarrista Carlos Moreno, con lo que The Long Johns Band abandona su clásica formación de power trio conformada por el cantante y guitarrista Dari King, el batería Andoni Elorriaga y el bajista Little Tejas Óscar, para convertirse en cuarteto. También destacan las colaboraciones, como la del pianista y teclista Reverendo Igor, de la mítica banda vasca The Reverendos, el
percusionista Tino González y el saxofonista Adolfo Noriega. La maestría y rigor de
Reverendo Igor llena de ecos de Chicago los cortes en los que participa, como la
“howlingwolfiana” “Bares”, el blues arrastrado “Sueños de un seductor”, el swing-blues de “El seminarista”, el blues menor “A veces llueve”, o la rockera “El representante”. Por su parte, Tino González y Adolfo Noriega realizan participaciones más puntuales, pero que dotan del color preciso a temas como “Chitlins con carne” y “Devil got my woman” en el caso de Tino, y a “Qué mal me sienta madrugar” y “Dobra”, en el de Adolfo. Además, la llegada del nuevo guitarrista Carlos Moreno ha permitido la presencia de lap steel en “Rural X-Files” acentuando el aire country de la composición, en la que canta el batería Andoni.

No faltan los homenajes a los clásicos. Esta vez les ha tocado a Skip James (“Devil Got
my woman”), Kenny Burrell (“Chitlins con carne”), Antonio Carlos Jobim (“Agua de
beber”), así como a la versión de Los Mismos de una vieja canción de Tony Orlando
(“Ata una cita al viejo roble”). Tampoco falta una referencia al cantautor de culto
cántabro Ganso Avisador, en “El adiós del Ganso Avisador”.

Aglutinando todos estos elementos diversos, The Long Johns Band han conseguido
consolidar un estilo propio y reconocible. En este sentido es un elemento fundamental el apartado lírico, con un sentido del humor muy personal, siguiendo la larga tradición del blues, y de la música popular en general desde el mester de juglaría, de conceptuar las letras como crónicas de la realidad cotidiana, aunque sea transformada mediante la parodia o la ironía.

THE LONG JOHNS BAND